Se cavó su propia tumba. Volvió a hablar de centros clandestinos que no existían, pero dijo que visitaba esos lugares. Que "asistía" a los detenidos.
El sacerdote represor Christian Von Wernich sigue admitiendo todo lo que hizo. No oculta nada y, de hecho, para él no son crímenes. Ya se lo juzgará en la Tierra.
El martes 27 de diciembre, el juez Corazza le dictó un nuevo procesamiento. Ahora, no hay riesgos de que salga en libertad: la otra causa está paralizada por una indecisa Sala II de la Cámara Federal de La Plata, que no define en confirmar la prisión preventiva dictada en octubre de 2003.
COBERTURA > Página/12: El cura que hacía "visitas funestas"
Clarìn.com: Procesan con preventiva a Von Wernich
Análisis Digital (Paraná): Brienza: "el rol de Von Wernich era quebrar detenidos"
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